El nuevo marco regulatorio acerca de los nuevos Informes de Sostenibilidad Corporativa parte de las lecciones aprendidas, aportando mayor rigurosidad y exigencia a la calidad y estandarización de los datos corporativos, asumiendo que los datos financieros y los datos relacionados con la sostenibilidad y el respeto medioambiental tienen igual rango.
Antecedentes: los Estados de Información No financiera (EINF) como consecuencia de la crisis del 2008
Un elemento clave que explica la crisis económica de 2008 no es otro que la credibilidad perdida por parte de determinadas empresas. Numerosas corporaciones clave y sectores económicos estratégicos perdieron la confianza de la sociedad (y de los llamados “inversores”) a raíz de las situaciones de insostenibilidad que se escondían bajo sus informes y cuentas, los cuales entorpecieron la detección de problemas estratégicos a tiempo.
A raíz de este contexto, y con algunas lecciones aprendidas, apareció como texto culmen de un proceso de elaboración comunitaria (Directiva 2004/109/CE; Directiva 2006/43/CE; Directiva 2013/34/UE y Reglamento 537/2014) la Directiva 2014/95/UE relacionada con la Información No Financiera, la cual, en España tuvo su última transposición con la Ley 11/2018 (una de las más avanzadas en relación a otros países).
El nuevo marco jurídico de los Estados de Información No Financiera -respuesta a las demandas de transparencia por parte de los mercados y la sociedad- fue claro al establecer un potente principio en el ámbito empresarial, instalando la idea de que no sólo importa cuánto dinero se gane, sino la forma en que se gana ese dinero. Nacían así los EINF, en los que empresas de determinadas magnitudes están obligadas a incluir información relacionada con cuestiones medioambientales, sociales, de personal, de derechos humanos y de lucha contra la corrupción y el soborno.
Aprender lecciones y sofisticar mecanismos: la nueva directiva de información no financiera
Las expectativas que suscitó la Directiva 2014/95/UE (en España, a través de la mencionada Ley que transpuso el mandato comunitario) en relación a las posibilidades de mejorar la calidad de la información medioambiental y social de las empresas, se han ido poco a poco viendo resquebrajadas. Si bien fue un primer gran avance en la materia, la incipiente normativa carece de mecanismos adecuados de supervisión, le faltan criterios específicos sobre la información a reportar, y es limitada en cuanto a la fiabilidad y comparabilidad de la información presentada.
Tal y como se desprende de los análisis realizados por una gran variedad de reconocidos organismos (entre las que destacan los correctivos informes relacionados a la Información No Financiera del sector bancario elaborados por el Instituto Internacional de Derecho y Medio Ambiente) estos ingredientes han provocado la ineficacia y la utilidad limitada de los EINF, dando pie a sus posibilidades como arma de greenwashing y apuntalando la desafección ciudadana y la pérdida de credibilidad por parte de las empresas.
Sin embargo, el pasado 5 de enero entró en vigor la nueva Directiva 2022/2464 del Parlamento Europeo y del Consejo, relativa a la presentación de información sobre sostenibilidad por parte de las empresas. La llamada Directiva sobre Informes de Sostenibilidad Corporativa (CSRD) se ha desarrollado en consonancia con los objetivos del nuevo Green Deal de la UE, tratando de corregir las carencias existentes aportando exhaustividad, rigurosidad y control a los datos mediante una innovación hasta hora nunca encontrada en materia de RSC: la igualación en importancia y rango de los datos financieros y los no financieros. La nueva Directiva se suma a la reciente medida que tomó la Comisión Europea de desarrollar una norma de reporte estandarizado y homogéneo, favoreciendo la comparabilidad de los informes, estando alineados con los requisitos impuestos por el Reglamento de Divulgación de Finanzas Sostenibles y con la Taxonomía europea.
Los Informes de Sostenibilidad Corporativa y su importancia para todo tipo de organización
Son muchas las novedades introducidas en el nuevo texto (podríamos mencionar las relacionadas con las nuevas garantías de los datos exigidos, la mayor responsabilidad del Consejo de Administración de las empresas, las exigencias de informar sobre su cadena de valor o su alineación con la taxonomía de la UE) sin embargo, queremos poner el acento aquí en las claves de lo que supondrá el nuevo Informe de Sostenibilidad Corporativa en las materias que entendemos clave.
Según el nuevo enfoque que supondrán los Informes de Sostenibilidad Corporativa, las empresas deberán centrarse en evaluar el riesgo de sostenibilidad que afecta a la empresa, así como el impacto de la empresa en la sociedad y el medioambiente. Estos datos, elevados de rango y con mayores garantías, deberán incluir información sobre la sostenibilidad integral de la empresa, destacando entre otros, los datos relativos a la economía circular, el uso de los recursos, el agua, la contaminación emitida, la adaptación al cambio climático, así como las medidas en materia de igualdad, condiciones laborales, inclusión, valores éticos y gestión de riesgos.
De entre esas novedades que trae el nuevo marco regulatorio está la ampliación del ámbito de aplicación: en España el marco actual obliga a más de 11.000 empresas; el que inaugura la nueva Directiva obligará a casi 50.000 (algunas de las cuales, las primeras de ellas en base a los criterios establecidos de implementación, estarán obligadas a informar sobre los datos de 2024).
Sin embargo, más allá del tamaño de la empresa y de la obligatoriedad que indica la última normativa, desde Ideas Medioambientales queremos apuntar la vital importancia que van a adquirir los Informes de Sostenibilidad Corporativa para cualquier tipo de entidad que quiera ser partícipe de los escenarios sociales y financieros que acontecen. Además, ya sabemos que lo que hoy sólo es legalmente obligatorio para unos pocos, mañana deja de ser socialmente potestativo para la mayoría.
Afortunadamente para el medioambiente, pero también para consumidores, trabajadores y empresas, llega la ola de la sostenibilidad y los informes exhaustivos y con garantías.
Si quieres anticiparte a las obligaciones comunitarias en relación a los Informes de Sostenibilidad Corporativa, si necesitas informarte sobre los beneficios que ofrece la Due Diligence y el compliance ambiental, o simplemente quieres aprovechar las oportunidades de desarrollar una responsabilidad social y medioambiental en tu empresa o entidad, ponte en contacto con el equipo de Ideas Medioambientales. |
---|
Valentín Cano, Sostenibilidad